Rusia, que no espera ya nada de la alianza de Napoleón, deja de observar el bloqueo continental; la lucha diplomática se agria y la guerra estalla (1812).
Suecia se adjunta a la coalición.
Francia tiene para aliados Italia, Alemania, Dinamarca, e incluso Austria y la Prusia, combinadas ambiguos.
Napoleón, que reunió a 450.000 hombres, cuyos 200.000 extranjeros, invade Rusia con la mitad de sus fuerzas, se abre por victorias la carretera de Vilna, Vitebsk, Smolensk, adquiere una gran victoria al Moskova y entra en Moscú, pero no tiene ya con él que 100.000 hombres.
El incendio encendido por los Rusos fuerza a Napoleón a dejar Moscú, y el frío prematuro mata a los hombres y a los caballos; el ejército carece de comidas; 60.000 hombres fallecen de Moscú a Smolensk.
Los Rusos acorralan al ejército francés al Bérésina y destruyen su retaguardia; el redoblamiento del frío acaba la ruina del ejército.
Por 450.000 hombres, so'lo permanece alrededor 150.000, dispersado en las plazas fuertes de Alemania.